El viernes pasado me contactó un cliente de España muy preocupado, casi que desesperado. Le había visitado un joven arquitecto diplomado en BIM Manager, que le habló sobre las tendencias y los cambios que debería instrumentar en los próximos años. Para entender mejor el nerviosismo de este cliente (y amigo), vale decir que es arquitecto, 57 años, comparte el estudio con 2 socios y 10 o 12 empleados (delineantes y otros profesionales). La mayor parte de sus encargos son del estado y la principal herramienta que usan para sus proyectos es AutoCAD.
El motivo de la visita fue ofrecer sus servicios, teniendo en cuenta lo que se viene en España, en relacionado a la implantación BIM. Lo que preocupó a mi cliente fue la mención (o al menos así lo entendió él) que en pocos años el BIM llevaría a la desaparición de AutoCAD y que la recomendación era dejarlo de usar desde ahora, por ser un programa obsoleto.
Un comentario de tal magnitud me indignan y me molestan mucho; si bien me gustaría pensar que se trató de un error o una mala interpretación, no es la primera vez que escucho estos comentarios; pero es peor cuando provienen de personas que se presentan con tantas credenciales.
¿Qué se busca con la implantación BIM?
Se busca reducir el coste global del edificio, tanto en su etapa de proyecto, como de construcción y de uso. Se busca mejorar la calidad de los procesos. Se busca mejorar la transparencia.
En mi país, Uruguay, es común que se aprueben licitaciones en el estado por un determinado monto, pero que en los hechos terminen costando 4 o 5 veces más. ¿Por qué? Por imprecisiones, aspectos que no fueron tenidos en cuentas, modificaciones que se realizaron en la obra, problemas de suministros, problemas con subcontratos, marchas y contramarchas y cientos de razones que explican con mucho blablablá…
La falta de información precisa y estandarizada, permite que todo esto suceda.
¿Cuáles son los caminos para lograr las mejoras?
Mejorar la información: Más y mejor información. Disponer de la información en el momento necesario permite tomar decisiones correctas, permite coordinar proyectos y sub-proyectos, detectar los problemas a tiempo, etc. La información debe ser rigurosa, exacta, para que todos los colabores disponga de ella cuándo y cómo la necesiten; debe responder a estándares que todos conozcan, para que no se preste a la interpretación arbitraria de cada uno.
En las etapas de proyecto, construcción y mantenimiento de un edificio participan muchas empresas, que utilizan programas muy diferentes. El rol del BIM Manager no consiste en promover el uso de un único programa, sino todo lo contrario; consiste en gestionar y coordinar todos los recursos disponibles, humanos y tecnológicos. Consiste en asegurar la interoperabilidad entre todos los colaboradores en tiempo real, para que los usuarios de AutoCAD, Revit, AllPlan, ArchiCAD, etc., puedan aportar y nutrirse de una base de datos única; para que el arquitecto, el ingeniero, el constructor, el sub contratista, el contador, el promotor y el dueño, puedan tomar sus decisiones cuando corresponda y basadas en información correcta.
En próximos artículos profundizaré en el concepto BIM y la participación de AutoCAD en este modelo o metodología para gestionar la información del edificio; pero les aseguro que el BIM no solo NO excluye a AutoCAD en esta nueva etapa, sino que AutoCAD puede seguir siendo la principal herramienta de diseño. El cambio que debemos hacer no consiste en cambiar la herramienta, consiste en cambiar la forma de usarla y colocar a la información como protagonista de las acciones.
Talleres de AutoCAD con inicio el 5 de noviembre
0 comentarios
Publicar un comentario